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El 'Vatican Information Service' (VIS) es un boletín informativo de la Oficina de Prensa Santa Sede. Transmite diariamente información sobre la actividad magisterial y pastoral del Santo Padre y de la Curia Romana... []

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domingo, 27 de septiembre de 2009

EUROPA DEBE MANTENER VIVA SU HERENCIA CRISTIANA


CIUDAD DEL VATICANO, 26 SEP 2009 (VIS).-El presidente de la República Checa, Václav Klaus, dio esta tarde a las 16,30 la bienvenida al Santo Padre en el Castillo Hradcany, construido en el siglo IX y antigua sede del los emperadores del Sacro Imperio Romano, de reyes y  gobernantes. Desde 1918 el Castillo, una ciudadela fortificada que engloba diversos monumentos y museos, es sede de la Presidencia de la República y constituye el símbolo cultural e histórico por excelencia de Bohemia.

  Benedicto XVI departió en privado con el presidente Klaus para encontrarse después con el primer ministro, Jan Fischer y los presidentes del Senado y de la Cámara de Diputados, respectivamente Premysl Sobotka y Miroslav Vlcek. A continuación, acompañado del presidente Klaus y de su esposa, el Papa asistió en la Sala Española a una breve ejecución musical de la Orquesta Filarmónica Checa, después de la cual tuvo lugar el encuentro del Santo Padre con las autoridades políticas y administrativas de la nación, el cuerpo diplomático, los rectores de los ateneos y diversas personalidades del mundo de la sociedad civil, de la empresa y la cultura checas.

  En el discurso que dirigió a los presentes, el Papa recordó que su viaje coincidía "con el vigésimo aniversario de la caída de los regímenes totalitarios en Europa Central y Oriental, de la "Revolución de Terciopelo", que restauró la democracia en esta nación. La euforia que la acogió se expresaba en términos de libertad. A dos décadas de distancia de los profundos cambios políticos que transformaron este continente el proceso de saneamiento y reconstrucción prosigue, ahora dentro de un contexto más amplio de la unificación europea y de un mundo cada vez más globalizado".

  "La aspiración de los ciudadanos y las expectativas depositadas en los gobiernos - rememoró el Santo Padre- reclamaban nuevos modelos en la vida pública y de solidaridad entre las naciones y pueblos, sin los cuales el futuro de justicia, de paz y prosperidad, tan esperado, no habría tenido respuesta. Esos deseos siguen evolucionando. Hoy, sobre todo entre los jóvenes, se plantea de nuevo la pregunta sobre la naturaleza de la libertad conquistada".

  "Cada generación tiene la tarea de comprometerse en la ardua búsqueda de cómo ordenar rectamente la realidad humana, esforzándose en comprender el uso correcto de la libertad. (...) La verdadera libertad presupone la búsqueda de la verdad, del bien verdadero, y por tanto encuentra su cumplimiento en el discernimiento de lo que es recto y justo. En otras palabras, la verdad, es la norma guía para la libertad y la bondad es su perfección".

  "En verdad la alta responsabilidad de agudizar la sensibilidad por lo verdadero y lo bueno recae sobre los que ejercen el papel de guía: en campo religioso, político o cultural", subrayó. "Para los cristianos, la verdad tiene un nombre: Dios. Y el bien tiene un rostro: Jesucristo. La fe cristiana desde los tiempos de los santos Cirilo y Metodio y de los primeros misioneros ha jugado un papel decisivo para plasmar la herencia cultural y espiritual de este país. Debe seguir siendo así en el presente y en el futuro. El rico patrimonio de valores espirituales y culturales que se expresan unos a través de otros, no ha dado forma solamente a la identidad de esta nación, sino que la ha dotado también de la perspectiva necesaria para ejercer un papel de cohesión en el corazón de Europa".

  La nación checa, "como bien sabemos -dijo el Papa-, ha atravesado capítulos dolorosos y lleva en sí las cicatrices de trágicos sucesos causados por la incomprensión, la guerra y la persecución. Y sin embargo, también es verdad que sus raíces cristianas han favorecido el crecimiento de un considerable espíritu de perdón, de reconciliación y colaboración, que ha hecho a la gente de esta tierra capaz de reencontrar la libertad y de inaugurar una nueva era, (...) una nueva esperanza. Este es el espíritu que necesita la Europa de hoy".

  Europa "es más que un continente. Es una casa. (...) Respetando plenamente la distinción entre la esfera política y la religiosa -que garantiza la libertad de los ciudadanos para expresar su propio credo religioso y de vivir en sintonía con él- quiero subrayar el papel insustituible del cristianismo para la formación de la conciencia de cada generación y para la promoción de un consenso ético de fondo, al servicio de todos los que llaman casa a este continente".

  El Papa afirmó que su presencia en la capital conocida como "corazón de Europa"  llevaba a interrogarse sobre en que consistía ese nombre. "Un indicio -dijo- nos lo dan, sin duda las joyas arquitectónicas de esta ciudad. (...) Su belleza expresa fe: son epifanías de Dios que nos hacen ver las grandes maravillas a las que podemos aspirar cuando damos cabida a nuestra dimensión estética y cognoscitiva de nuestro ser más profundo. (...) El encuentro creativo de la tradición clásica y del Evangelio ha dado vida a una visión del ser humano y de la sociedad sensible a la presencia de Dios en nosotros".

  "En el contexto de la encrucijada de civilizaciones, caracterizado tan a menudo por una alarmante escisión de la unidad de bondad, verdad y belleza y por la consiguiente dificultad de encontrar un consenso sobre valores humanos, todo esfuerzo por el progreso humano debe inspirarse en esa herencia viva. Europa, fiel a sus raíces cristianas, tiene una vocación particular para sostener esta visión trascendental en sus nuevas iniciativas al servicio del bien común y de los individuos".
 
  Acabado su discurso el Santo Padre se trasladó a la catedral de los santos Vito, Venceslao y Adalberto para celebrar las vísperas.
PV-REP. CHECA/DISCURSO AUTORIDADES/PRAGA            VIS 20090927 (950)  


REFORZAR VALORES ESPIRITUALES Y MORALES DE LA SOCIEDAD


CIUDAD DEL VATICANO, 26 SEP 2009 (VIS).-A las 18,00, el Papa presidió la celebración de las vísperas con los obispos, sacerdotes, religiosos, seminaristas y miembros de movimientos laicales en la Catedral de los Santos Vito, Venceslao y Adalberto de Praga.

  "Amar a Cristo y a los hermanos -dijo el Santo Padre- debe ser la característica de todos los bautizados y de todas las comunidades". En este sentido animó a los presentes a "alimentar el amor de Cristo con la oración y la escucha de su palabra; nutríos de El en la Eucaristía, y sed, con su gracia, artífices de unidad y de paz en todos los ambientes".

  Benedicto XVI puso de relieve que "tras el largo invierno de la dictadura comunista, vuestras comunidades cristianas, han vuelto a expresarse libremente". Sin embargo, añadió, "os dais cuenta de que hoy no es fácil vivir y testimoniar el Evangelio. La sociedad tiene todavía las heridas causadas por la ideología atea y a menudo está fascinada por la mentalidad moderna del consumismo hedonista, con una peligrosa crisis de valores humanos y religiosos y la deriva de un relativismo ético y cultural difundido. En este contexto -afirmó-, es urgente un renovado compromiso por parte de todos los miembros de la Iglesia para reforzar los valores espirituales y morales en la vida de la sociedad actual".

  "Que vuestras actividades pastorales -dijo- dediquen energías al campo de la educación de las nuevas generaciones. Que las escuelas católicas promuevan el respeto del ser humano, presten atención a la pastoral juvenil también fuera del ámbito escolar, sin descuidar a los otros fieles. ¡Cristo es para todos! Espero que haya un mayor entendimiento con las otra instituciones, tanto públicas como privadas. La Iglesia -siempre es útil repetirlo- no pide privilegios, sino únicamente poder obrar libremente al servicio de todos y con espíritu evangélico".

  El Papa alentó a los obispos y sacerdotes a "trabajar incansablemente por el bien de los que han sido confiados a su cuidado". Los consagrados, "con la profesión de los consejos evangélicos recordáis -dijo- el primado que Dios debe tener en la vida de todos los seres humanos y viviendo fraternalmente testimoniáis qué enriquecedor es la práctica del mandamiento del amor".

  Finalmente, el Papa pidió a los jóvenes seminaristas o que están en casas de formación que se preocuparan de "adquirir una sólida preparación cultural, espiritual y pastoral". Que en este Año Sacerdotal, (...) la figura del Santo Cura de Ars, un pastor totalmente entregado a Dios y a las almas, consciente de que precisamente su ministerio, animado por la oración, era su camino de santificación -concluyó-, sea un ejemplo para vosotros".

  Después de la celebración de las vísperas, el Santo Padre se trasladó a la nunciatura apostólica de Praga para pernoctar.
PV-REP. CHECA/VISPERAS/PRAGA                    VIS 20090927 (470)


CRISTO ES NUESTRA FIRME ESPERANZA


CIUDAD DEL VATICANO, 27 SEP 2009 (VIS).-El Papa se trasladó esta mañana en avión desde Praga a Brno, la segunda ciudad más importante de la República Checa, donde a las 10,00 celebró la Santa Misa en la explanada que se halla junto al aeropuerto de Brno. Entre las miles de personas presentes, había fieles de las diócesis eslovacas, polacas, austriacas y alemanas.

  Los textos de la liturgia estuvieron centrados en el tema de la esperanza. En la homilía, el Santo Padre afirmó que "la historia ha demostrado la absurdidad a la que llega el ser humano cuando excluye a Dios del horizonte de sus decisiones y de sus acciones, y lo duro que resulta construir una sociedad inspirada en los valores del bien, de la justicia y de la fraternidad, porque el ser humano es libre y su libertad sigue siendo frágil".

  Tras poner de relieve que la fe y la esperanza en la época actual "han sido relegadas a al esfera privada y ultraterrena, mientras en la vida concreta y pública se ha afirmado la confianza en el progreso científico y económico", el Papa dijo: "Sabemos que este progreso es ambiguo: abre posibilidades de bien junto a perspectivas negativas", pero "no bastan para garantizar el bienestar moral de la sociedad".

  "El ser humano -subrayó- tiene necesidad de ser librado de las opresiones materiales, pero debe ser salvado, más profundamente, de los males que afligen el espíritu. ¿Y quién puede salvarlo sino Dios -se preguntó-, que es Amor y ha revelado su rostro de Padre omnipotente y misericordioso en Jesucristo? Cristo es nuestra firme esperanza".

  El Santo Padre señaló que "aquí como en todas partes, en los siglos pasados muchas personas sufrieron por mantenerse fieles al Evangelio y no perdieron la esperanza; muchos se sacrificaron por devolver la dignidad al ser humano y libertad a los pueblos, encontrando en la adhesión generosa a Cristo la fuerza para construir una nueva humanidad".

  "También en la sociedad actual, donde tantas formas de pobreza nacen del aislamiento, del no ser amados, del rechazo de Dios y de una cerrazón profunda y trágica del hombre, que se cree autosuficiente, o simplemente un hecho insignificante y pasajero; en este mundo nuestro que está alienado "cuando se entrega a proyectos exclusivamente humanos", solo Cristo puede ser nuestra esperanza segura. Este es el anuncio que nosotros los cristianos estamos llamados a difundir cada día, con nuestro testimonio".

  Acabada la misa antes de rezar el Angelus, el Papa resaltó que "Moravia está bendecida por muchos santuarios marianos, que multitud de peregrinos visitan durante todo el año".

  Benedicto XVI pidió a la Virgen que mantenga "la llama de la fe de todos, la fe alimentada también por numerosas tradiciones populares que tiene profundas raíces en el pasado, pero que justamente tratáis de conservar para que no se pierda el calor de la convivencia familiar en los pueblos y en las ciudades. A veces se constata con cierta nostalgia que el ritmo de la vida moderna tiende a borrar algunas huellas de un patrimonio rico de fe. Es importante que no se pierda de vista el ideal expresado por las costumbres tradicionales, y que por encima de todo se mantenga el patrimonio espiritual de vuestros antepasados, para conservarlo, y que responda a las exigencias del tiempo presente".
PV- REP. CHECA/MISA:ANGELUS/BRNO                    VIS 20090927 (560)



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