CIUDAD DEL VATICANO, 3 NOV 2010 (VIS).-Este mediodía se presentó en la Oficina de Prensa de la Santa Sede la Asamblea Plenaria del Pontificio Consejo de la Cultura (10-13 noviembre 2010), que tratará sobre el tema: “Cultura de la comunicación y nuevos lenguajes”.
Intervinieron en la rueda de prensa, el arzobispo Gianfranco Ravasi, monseñor Pasquale Iacobone y Richard Rouse, respectivamente presidente, responsable del departamento “Arte y Fe” y responsable del departamento “Comunicación y lenguajes” del Pontificio Consejo de la Cultura; y el obispo Gerhard Ludwig Müller, de Regensburg (Alemania), miembro del Pontificio Consejo de la Cultura.
Monseñor Iacobone explicó que en la plenaria hablarán sobre “el uso del lenguaje y la comunicación, para estudiar la actual situación y proponer líneas de acción para la misión evangelizadora de la Iglesia”.
Los participantes debatirán acerca de “los nuevos lenguajes, en particular el cine, la música, las artes figurativas y plásticas, Internet y las posibilidades multimediales para individuar las palabras, colores, sonidos e imágenes capaces de presentar la vida cristiana como una experiencia válida hoy y para todos”.
“Para favorecer la comunicación interpersonal –señaló monseñor Iacobone-, no se leerán textos, sino que habrá conversaciones con expertos, como Ennio Morricone, Dario Viganò, Robert Barron y el administrador delegado de Microsoft Italia”.
Durante la plenaria también se afrontarán “las características de la interactividad y de la participación, de la claridad y la sencillez, evitando la simplificación, y los lenguajes figurativos y narrativos con el fin de transmitir mejor a nuestros contemporáneos de una forma comprensible lo que hemos recibido”.
A continuación, el obispo Müller presentó el XII volumen, en lengua alemana, de la “Opera Omnia” de Joseph Ratzinger, titulado “Künder des Wortes und Diener eurer Freude -Theologie und Spiritualität des Weihesakramentes” (Proclamadores de la Palabra y siervos de vuestra alegría. Teología y espiritualidad del Sacramento del Orden).
El obispo Muller, responsable de las Obras Completas de Joseph Ratzinger, explicó que los escritos recogidos en el volumen abarcan casi medio siglo, a partir de algunos textos que precedieron de algunos años la apertura del Concilio Vaticano II. “A este acontecimiento fundamental de la historia eclesiástica más reciente se suelen asociar, según el punto de vista, el inicio de una transformación, conforme con el espíritu de la época, o una profunda crisis de la Iglesia y, en particular, del sacerdocio”, dijo.
En la sección A del libro, titulada: “Teología del Sacramento del Orden”, Ratzinger analiza las causas de esa crisis e “ilustra positivamente el fundamento bíblico y el coherente desarrollo histórico-dogmático del sacramento del Orden”, mientras que en la sección B, titulada: “Siervos de vuestra alegría”, el lector encontrará “una recopilación de meditaciones sobre la espiritualidad sacerdotal ya publicadas como obra individual con el mismo título”. La sección C recoge “diversas homilías pronunciadas durante consagraciones sacerdotales y de diáconos, primeras misas y jubileos”.
“Para recuperar la identidad sacerdotal en la relación con Cristo, es indispensable la disponibilidad para considerarse a sí mismo como siervo de la Palabra y testigo de Dios en la sucesión de Cristo y para vivir en comunión con El. Para ese fin, el sacerdote debe contar con una buena formación teológica y con una referencia permanente a la teología científica”.
“Joseph Ratzinger, con los escritos de este volumen, indica un camino para salir de la crisis en que había caído el sacerdocio católico a causa de los enfoques teológicos y sociológicos deficitarios y de declaraciones encaminadas a suscitar en muchos sacerdotes, que habían emprendido con amor y entrega su camino, inseguridad personal y desconcierto a propósito de su papel dentro de la Iglesia”, concluyó el prelado, subrayando que con este volumen “ se cumple el deseo del autor de dedicar un entero volumen de la Obra a la teología del Sacramento del Orden”.
OP/ VIS 20101103 (630)
Intervinieron en la rueda de prensa, el arzobispo Gianfranco Ravasi, monseñor Pasquale Iacobone y Richard Rouse, respectivamente presidente, responsable del departamento “Arte y Fe” y responsable del departamento “Comunicación y lenguajes” del Pontificio Consejo de la Cultura; y el obispo Gerhard Ludwig Müller, de Regensburg (Alemania), miembro del Pontificio Consejo de la Cultura.
Monseñor Iacobone explicó que en la plenaria hablarán sobre “el uso del lenguaje y la comunicación, para estudiar la actual situación y proponer líneas de acción para la misión evangelizadora de la Iglesia”.
Los participantes debatirán acerca de “los nuevos lenguajes, en particular el cine, la música, las artes figurativas y plásticas, Internet y las posibilidades multimediales para individuar las palabras, colores, sonidos e imágenes capaces de presentar la vida cristiana como una experiencia válida hoy y para todos”.
“Para favorecer la comunicación interpersonal –señaló monseñor Iacobone-, no se leerán textos, sino que habrá conversaciones con expertos, como Ennio Morricone, Dario Viganò, Robert Barron y el administrador delegado de Microsoft Italia”.
Durante la plenaria también se afrontarán “las características de la interactividad y de la participación, de la claridad y la sencillez, evitando la simplificación, y los lenguajes figurativos y narrativos con el fin de transmitir mejor a nuestros contemporáneos de una forma comprensible lo que hemos recibido”.
A continuación, el obispo Müller presentó el XII volumen, en lengua alemana, de la “Opera Omnia” de Joseph Ratzinger, titulado “Künder des Wortes und Diener eurer Freude -Theologie und Spiritualität des Weihesakramentes” (Proclamadores de la Palabra y siervos de vuestra alegría. Teología y espiritualidad del Sacramento del Orden).
El obispo Muller, responsable de las Obras Completas de Joseph Ratzinger, explicó que los escritos recogidos en el volumen abarcan casi medio siglo, a partir de algunos textos que precedieron de algunos años la apertura del Concilio Vaticano II. “A este acontecimiento fundamental de la historia eclesiástica más reciente se suelen asociar, según el punto de vista, el inicio de una transformación, conforme con el espíritu de la época, o una profunda crisis de la Iglesia y, en particular, del sacerdocio”, dijo.
En la sección A del libro, titulada: “Teología del Sacramento del Orden”, Ratzinger analiza las causas de esa crisis e “ilustra positivamente el fundamento bíblico y el coherente desarrollo histórico-dogmático del sacramento del Orden”, mientras que en la sección B, titulada: “Siervos de vuestra alegría”, el lector encontrará “una recopilación de meditaciones sobre la espiritualidad sacerdotal ya publicadas como obra individual con el mismo título”. La sección C recoge “diversas homilías pronunciadas durante consagraciones sacerdotales y de diáconos, primeras misas y jubileos”.
“Para recuperar la identidad sacerdotal en la relación con Cristo, es indispensable la disponibilidad para considerarse a sí mismo como siervo de la Palabra y testigo de Dios en la sucesión de Cristo y para vivir en comunión con El. Para ese fin, el sacerdote debe contar con una buena formación teológica y con una referencia permanente a la teología científica”.
“Joseph Ratzinger, con los escritos de este volumen, indica un camino para salir de la crisis en que había caído el sacerdocio católico a causa de los enfoques teológicos y sociológicos deficitarios y de declaraciones encaminadas a suscitar en muchos sacerdotes, que habían emprendido con amor y entrega su camino, inseguridad personal y desconcierto a propósito de su papel dentro de la Iglesia”, concluyó el prelado, subrayando que con este volumen “ se cumple el deseo del autor de dedicar un entero volumen de la Obra a la teología del Sacramento del Orden”.
OP/ VIS 20101103 (630)
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Considero que el siguiente párrafo contiene las claves de lo que en la comunicación para la evangelizacío debemos resolver.
ResponderEliminarEduardo Barrantes
eduardoraulbarrantes@hotmail.com
"...las características de la interactividad y de la participación, de la claridad y la sencillez, evitando la simplificación, y los lenguajes figurativos y narrativos con el fin de transmitir mejor a nuestros contemporáneos de una forma comprensible lo que hemos recibido”.